Los dulces de Los Almendros fueron parte de los productos manabitas que ganaron el primer lugar en los World Food Gift Challenge 2025
Hace 40 años, aproximadamente, cuando las calles de Rocafuerte eran aún de tierra y lodo, un grupo de niños y adolescentes las recorría y esperaba con ansia en las paradas de los buses que llegaban de otros cantones para vender dulces. Los llevaban en fundas pequeñas, amarradas en las puntas a un pedazo de metal largo, al que muchos llamaban “gancho”.
Los dulces de Los Almendros fueron parte de los productos manabitas que ganaron el primer lugar en los World Food Gift Challenge 2025
Hace 40 años, aproximadamente, cuando las calles de Rocafuerte eran aún de tierra y lodo, un grupo de niños y adolescentes las recorría y esperaba con ansia en las paradas de los buses que llegaban de otros cantones para vender dulces. Los llevaban en fundas pequeñas, amarradas en las puntas a un pedazo de metal largo, al que muchos llamaban “gancho”.
El chocolate orgánico, el café, los chifles, los dulces y la crema de maní, entre otros productos típicos, hicieron que la provincia ecuatoriana de Manabí sea elegida como la ‘Región Gastronómica Mundial de 2026’, un reconocimiento cuyo prefecto, Leonardo Orlando, anticipa que permitirá impulsar la proyección internacional de la gastronomía manabita, una de las más afamadas de Ecuador.
«Para Manabí supone un mundo de oportunidades», indicó en una entrevista con EFE Orlando, que ve en esta distinción la posibilidad de «desarrollo sostenible, intercambios de experiencias, promoción del turismo y puesta en valor nuestros activos naturales, producción, gastronomía, cultura e identidad».
El reconocimiento se dio en el concurso ‘World Food Gift Challenge’, organizado recientemente en Sicilia (Italia) por el Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT), que premia a los mejores productos artesanales alimentarios del mundo, con un enfoque en sostenibilidad, innovación con identidad y apoyo a los pequeños productores.
Manabí, que quedó en el primer lugar de un total de 19 regiones participantes de todo el planeta, seguida en segunda posición por Trondheim-Trøndelag (Noruega) y Aseer (Arabia Saudí).
Canasta de «sabores ancestrales» La provincia ecuatoriana, conocida por platos tradicionales como su ceviche, corviche (puré de plátano verde relleno), viche (sopa de mariscos con maní), tonga (guiso envuelto en hojas de plátano) o encebollado (sopa de pescado con cebolla), participó con una canasta artesanal tejida en Montecristi con «sabores ancestrales» que proponía «una verdadera ofrenda y experiencia sensorial con productos que sintetizan la herencia viva de esta región milenaria».
En la canasta había chocolate con cacao orgánico de la comunidad de Piedra de Plata; café de Jama; chifles de Portoviejo, licor artesanal de pechiche, crema de maní con chocolate orgánico desarrollada en el laboratorio culinario Iche; los dulces tradicionales de Rocafuerte, y el libro ‘Manabí, gastronomía milenaria. 200 recetas, sus relatos y secretos”.
Ese conjunto de elementos gastronómicos conectaba los sabores, texturas y saberes de Manabí desde sus raíces precolombinas —Valdivia, Jama Coaque, Manteño— hasta sus expresiones contemporáneas e innovadoras.
«Lo que hemos puesto en valor en esta pequeña canasta, con productos tradicionales y muy nuestros, reflejan nuestra capacidad de evocación productiva, enfocada en la sostenibilidad y en las buenas prácticas agroalimentarias», señaló Orlando para reivindicar el patrimonio gastronómico y el potencial internacional de la cocina tradicional de Manabí.
Quito, 19 may (EFE).- El chocolate orgánico, el café, los chifles, los dulces y la crema de maní, entre otros productos típicos, hicieron que la provincia ecuatoriana de Manabí sea elegida como la ‘Región Gastronómica Mundial de 2026’, un reconocimiento cuyo prefecto, Leonardo Orlando, anticipa que permitirá impulsar la proyección internacional de la gastronomía manabita, una de las más afamadas de Ecuador.
, 19 may (EFE).- El chocolate orgánico, el café, los chifles, los dulces y la crema de maní, entre otros productos típicos, hicieron que la provincia ecuatoriana de Manabí sea elegida como la ‘Región Gastronómica Mundial de 2026’, un reconocimiento cuyo prefecto, Leonardo Orlando, anticipa que permitirá impulsar la proyección internacional de la gastronomía manabita, una de las más afamadas de Ecuador.
“Para Manabí supone un mundo de oportunidades”, indicó en una entrevista con EFE Orlando, que ve en esta distinción la posibilidad de “desarrollo sostenible, intercambios de experiencias, promoción del turismo y puesta en valor nuestros activos naturales, producción, gastronomía, cultura e identidad”.
El reconocimiento se dio en el concurso ‘World Food Gift Challenge’, organizado recientemente en Sicilia (Italia) por el Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT), que premia a los mejores productos artesanales alimentarios del mundo, con un enfoque en sostenibilidad, innovación con identidad y apoyo a los pequeños productores.
Manabí, que quedó en el primer lugar de un total de 19 regiones participantes de todo el planeta, seguida en segunda posición por Trondheim-Trøndelag (Noruega) y Aseer (Arabia Saudí).
Canasta de “sabores ancestrales”
La provincia ecuatoriana, conocida por platos tradicionales como su ceviche, corviche (puré de plátano verde relleno), viche (sopa de mariscos con maní), tonga (guiso envuelto en hojas de plátano) o encebollado (sopa de pescado con cebolla), participó con una canasta artesanal tejida en Montecristi con “sabores ancestrales” que proponía “una verdadera ofrenda y experiencia sensorial con productos que sintetizan la herencia viva de esta región milenaria”.
En la canasta había chocolate con cacao orgánico de la comunidad de Piedra de Plata; café de Jama; chifles de Portoviejo, licor artesanal de pechiche, crema de maní con chocolate orgánico desarrollada en el laboratorio culinario Iche; los dulces tradicionales de Rocafuerte, y el libro ‘Manabí, gastronomía milenaria. 200 recetas, sus relatos y secretos”.
Ese conjunto de elementos gastronómicos conectaba los sabores, texturas y saberes de Manabí desde sus raíces precolombinas —Valdivia, Jama Coaque, Manteño— hasta sus expresiones contemporáneas e innovadoras.
“Lo que hemos puesto en valor en esta pequeña canasta, con productos tradicionales y muy nuestros, reflejan nuestra capacidad de evocación productiva, enfocada en la sostenibilidad y en las buenas prácticas agroalimentarias”, señaló Orlando para reivindicar el patrimonio gastronómico y el potencial internacional de la cocina tradicional de Manabí.
Sostenibilidad e innovación
El prefecto enfatizó la importancia que para la gastronomía manabita tiene la relación con los pequeños y medianos productores, la sostenibilidad, la innovación y el valor del trabajo de la mujer en estas cadenas productivas.
“Para nosotros es muy importante también el fortalecimiento de las redes de pequeños productores a nivel asociativo y de la producción orgánica”, comentó la autoridad provincial.
Entre los productos alimenticios más representativos de Manabí, Orlando destacó también al camarón, que presenta “una textura, color y sabor único” al crecer en la línea ecuatorial, así como otros alimentos acuícolas como las ostras o la concha prieta.
También mencionó la producción de chifles (láminas de plátano frito) con el plátano barraganete, además de otros productos elaborados como los licores de pitahaya, café y cacao y el rescate del licor de pechiche, “que se estaba perdiendo”.
Un patrimonio a preservar
“Vamos a preservar y proteger nuestro patrimonio gastronómico”, reiteró Orlando, pues él ve una gran oportunidad para desarrollar el turismo gastronómico sostenible en la provincia.
El prefecto de Manabí también remarcó las “alianzas estratégicas” con universidades para impulsar las escuelas de turismo y gastronomía, con “proyectos que también van a involucrar el apoyo de la cooperación internacional y también de los organismos multilaterales de financiamiento”.
El IGCAT entregará a finales de junio de manera oficial la distinción de ‘Región Mundial de la Gastronomía 2026’ a Manabí, que celebrará un festival gastronómico con motivo de ello, mientras que para finales del año próximo año acogerá un congreso gastronómico internacional, donde se entregarán premios a las mejores producciones audiovisuales sobre gastronomía.
Quito, 19 may (EFE).- El chocolate orgánico, el café, los chifles, los dulces y la crema de maní, entre otros productos típicos, hicieron que la provincia ecuatoriana de Manabí sea elegida como la ‘Región Gastronómica Mundial de 2026’, un reconocimiento cuyo prefecto, Leonardo Orlando, anticipa que permitirá impulsar la proyección internacional de la gastronomía manabita, una de las más afamadas de Ecuador.
«Para Manabí supone un mundo de oportunidades», indicó en una entrevista con EFE Orlando, que ve en esta distinción la posibilidad de «desarrollo sostenible, intercambios de experiencias, promoción del turismo y puesta en valor nuestros activos naturales, producción, gastronomía, cultura e identidad».
El reconocimiento se dio en el concurso ‘World Food Gift Challenge’, organizado recientemente en Sicilia (Italia) por el Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT), que premia a los mejores productos artesanales alimentarios del mundo, con un enfoque en sostenibilidad, innovación con identidad y apoyo a los pequeños productores.
Manabí, que quedó en el primer lugar de un total de 19 regiones participantes de todo el planeta, seguida en segunda posición por Trondheim-Trøndelag (Noruega) y Aseer (Arabia Saudí).
Canasta de «sabores ancestrales»
La provincia ecuatoriana, conocida por platos tradicionales como su ceviche, corviche (puré de plátano verde relleno), viche (sopa de mariscos con maní), tonga (guiso envuelto en hojas de plátano) o encebollado (sopa de pescado con cebolla), participó con una canasta artesanal tejida en Montecristi con «sabores ancestrales» que proponía «una verdadera ofrenda y experiencia sensorial con productos que sintetizan la herencia viva de esta región milenaria».
En la canasta había chocolate con cacao orgánico de la comunidad de Piedra de Plata; café de Jama; chifles de Portoviejo, licor artesanal de pechiche, crema de maní con chocolate orgánico desarrollada en el laboratorio culinario Iche; los dulces tradicionales de Rocafuerte, y el libro ‘Manabí, gastronomía milenaria. 200 recetas, sus relatos y secretos”.
Ese conjunto de elementos gastronómicos conectaba los sabores, texturas y saberes de Manabí desde sus raíces precolombinas —Valdivia, Jama Coaque, Manteño— hasta sus expresiones contemporáneas e innovadoras.
«Lo que hemos puesto en valor en esta pequeña canasta, con productos tradicionales y muy nuestros, reflejan nuestra capacidad de evocación productiva, enfocada en la sostenibilidad y en las buenas prácticas agroalimentarias», señaló Orlando para reivindicar el patrimonio gastronómico y el potencial internacional de la cocina tradicional de Manabí.
Sostenibilidad e innovación
El prefecto enfatizó la importancia que para la gastronomía manabita tiene la relación con los pequeños y medianos productores, la sostenibilidad, la innovación y el valor del trabajo de la mujer en estas cadenas productivas.
«Para nosotros es muy importante también el fortalecimiento de las redes de pequeños productores a nivel asociativo y de la producción orgánica», comentó autoridad provincial.
Entre los productos alimenticios más representativo de Manabí, Orlando destacó también al camarón, que presenta «una textura, color y sabor único» al crecer en la línea ecuatorial, así como otros alimentos acuícolas como las ostras o la concha prieta.
También mencionó la producción de chifles (láminas de plátano frito) con el plátano barraganete, además de otros productos elaborados como los licores de pitahaya, café y cacao y el rescate del licor de pechiche, «que se estaba perdiendo».
Un patrimonio a preservar
«Vamos a preservar y proteger nuestro patrimonio gastronómico», reiteró Orlando, pues él ve una gran oportunidad para desarrollar el turismo gastronómico sostenible en la provincia.
El prefecto de Manabí también remarcó las «alianzas estratégicas» con universidades para impulsar las escuelas de turismo y gastronomía, con «proyectos que también van a involucrar el apoyo de la cooperación internacional y también de los organismos multilaterales de financiamiento».
El IGCAT entregará a finales de junio de manera oficial la distinción de ‘Región Mundial de la Gastronomía 2026’ a Manabí, que celebrará un festival gastronómico con motivo de ello, mientras que para finales del año próximo año acogerá un congreso gastronómico internacional, donde se entregarán premios a las mejores producciones audiovisuales sobre gastronomía. EFE
Quito, 19 may (EFE).- El chocolate orgánico, el café, los chifles, los dulces y la crema de maní, entre otros productos típicos, hicieron que la provincia ecuatoriana de Manabí sea elegida como la ‘Región Gastronómica Mundial de 2026’, un reconocimiento cuyo prefecto, Leonardo Orlando, anticipa que permitirá impulsar la proyección internacional de la gastronomía manabita, una de las más afamadas de Ecuador. IMÁGENES: JUAN FRANCISCO CHÁVEZ RECURSOS GENERALES Y DECLARACIONES DE LEONARDO ORLANDO, PREFECTO DE MANABÍ
Quito, 19 may (EFE).- El chocolate orgánico, el café, los chifles, los dulces y la crema de maní, entre otros productos típicos, hicieron que la provincia ecuatoriana de Manabí sea elegida como la ‘Región Gastronómica Mundial de 2026’, un reconocimiento cuyo prefecto, Leonardo Orlando, anticipa que permitirá impulsar la proyección internacional de la gastronomía manabita, una de las más afamadas de Ecuador.
“Para Manabí supone un mundo de oportunidades”, indicó en una entrevista con EFE Orlando, que ve en esta distinción la posibilidad de “desarrollo sostenible, intercambios de experiencias, promoción del turismo y puesta en valor nuestros activos naturales, producción, gastronomía, cultura e identidad”.
El reconocimiento se dio en el concurso ‘World Food Gift Challenge’, organizado recientemente en Sicilia (Italia) por el Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT), que premia a los mejores productos artesanales alimentarios del mundo, con un enfoque en sostenibilidad, innovación con identidad y apoyo a los pequeños productores.
Manabí, que quedó en el primer lugar de un total de 19 regiones participantes de todo el planeta, seguida en segunda posición por Trondheim-Trøndelag (Noruega) y Aseer (Arabia Saudí).
Canasta de “sabores ancestrales” Fotografía del prefecto de Manabí, Leonardo Orlando, hablando en entrevista con EFE en Quito (Ecuador). EFE/ José Jácome La provincia ecuatoriana, conocida por platos tradicionales como su ceviche, corviche (puré de plátano verde relleno), viche (sopa de mariscos con maní), tonga (guiso envuelto en hojas de plátano) o encebollado (sopa de pescado con cebolla), participó con una canasta artesanal tejida en Montecristi con “sabores ancestrales” que proponía “una verdadera ofrenda y experiencia sensorial con productos que sintetizan la herencia viva de esta región milenaria”.
En la canasta había chocolate con cacao orgánico de la comunidad de Piedra de Plata; café de Jama; chifles de Portoviejo, licor artesanal de pechiche, crema de maní con chocolate orgánico desarrollada en el laboratorio culinario Iche; los dulces tradicionales de Rocafuerte, y el libro ‘Manabí, gastronomía milenaria. 200 recetas, sus relatos y secretos”.
Ese conjunto de elementos gastronómicos conectaba los sabores, texturas y saberes de Manabí desde sus raíces precolombinas —Valdivia, Jama Coaque, Manteño— hasta sus expresiones contemporáneas e innovadoras.
“Lo que hemos puesto en valor en esta pequeña canasta, con productos tradicionales y muy nuestros, reflejan nuestra capacidad de evocación productiva, enfocada en la sostenibilidad y en las buenas prácticas agroalimentarias”, señaló Orlando para reivindicar el patrimonio gastronómico y el potencial internacional de la cocina tradicional de Manabí.
Sostenibilidad e innovación Fotografía del prefecto de Manabí, Leonardo Orlando, hablando en entrevista con EFE en Quito (Ecuador). EFE/ José Jácome El prefecto enfatizó la importancia que para la gastronomía manabita tiene la relación con los pequeños y medianos productores, la sostenibilidad, la innovación y el valor del trabajo de la mujer en estas cadenas productivas.
“Para nosotros es muy importante también el fortalecimiento de las redes de pequeños productores a nivel asociativo y de la producción orgánica”, comentó autoridad provincial.
Entre los productos alimenticios más representativo de Manabí, Orlando destacó también al camarón, que presenta “una textura, color y sabor único” al crecer en la línea ecuatorial, así como otros alimentos acuícolas como las ostras o la concha prieta.
También mencionó la producción de chifles (láminas de plátano frito) con el plátano barraganete, además de otros productos elaborados como los licores de pitahaya, café y cacao y el rescate del licor de pechiche, “que se estaba perdiendo”.
Un patrimonio a preservar “Vamos a preservar y proteger nuestro patrimonio gastronómico”, reiteró Orlando, pues él ve una gran oportunidad para desarrollar el turismo gastronómico sostenible en la provincia.
El prefecto de Manabí también remarcó las “alianzas estratégicas” con universidades para impulsar las escuelas de turismo y gastronomía, con “proyectos que también van a involucrar el apoyo de la cooperación internacional y también de los organismos multilaterales de financiamiento”.
El IGCAT entregará a finales de junio de manera oficial la distinción de ‘Región Mundial de la Gastronomía 2026’ a Manabí, que celebrará un festival gastronómico con motivo de ello, mientras que para finales del año próximo año acogerá un congreso gastronómico internacional, donde se entregarán premios a las mejores producciones audiovisuales sobre gastronomía.
En un hecho histórico que marca un antes y un después para la proyección internacional de la cultura y gastronomía ecuatoriana, Manabí ha conquistado hoy el Primer Lugar Mundial en el reconocido certamen World Food Gift Challenge 2025, desarrollado este 9 de mayo en Sicilia, Italia, entre más de 20 regiones del planeta. Este triunfo no solo posiciona a Ecuador como un referente global en la innovación y preservación del patrimonio gastronómico, sino que también representa el primer gran resultado internacional del Plan Quinquenal 2025–2029, impulsado por el Comité Promotor de Manabí como Región Mundial de la Gastronomía 2026.
Manabí participó con una canasta artesanal tejida en Montecristi, bajo el título “Los Sabores Ancestrales de Manabí” o “The Ancestral Flavours of Manabí”, que representa una verdadera ofrenda sensorial con productos que sintetizan la herencia viva de esta región milenaria. La propuesta incluyó el chocolate orgánico Toák de Piedra de Plata, Bolívar; Café Tabuga de Jama; chifles de Portoviejo de Plantain Republic; licor artesanal de Pechiche; la crema de maní con chocolate orgánico desarrollada en el laboratorio culinario ICHE; los dulces tradicionales de Los Almendros de Rocafuerte; y el libro “Manabí Gastronomía Milenaria 200 recetas, sus relatos y secretos”. Más que una colección de productos, esta propuesta fue presentada como una experiencia cultural multisensorial que conecta los sabores, texturas y saberes de Manabí desde sus raíces precolombinas —Valdivia, Jama Coaque, Manteño— hasta sus expresiones contemporáneas e innovadoras.
Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue la intervención, de la Economista Imelda Muñoz Poggi, Directora de Turismo, Cultura y Patrimonio del Gobierno Provincial de Manabí en representación del Ecuador, cuya presentación conmovió profundamente a los miembros del jurado internacional. Su mensaje transmitió con claridad la esencia de un pueblo resiliente, creativo y orgulloso de su legado.
Los tres primeros lugares del World Food Gift Challenge 2025 fueron para: Manabí, Ecuador (1.º lugar); Trondheim-Trøndelag, Noruega (2.º lugar); y Aseer, Arabia Saudita (3.º lugar). La competencia, organizada por el International Institute of Gastronomy, Culture, Arts and Tourism (IGCAT), reconoce los mejores productos artesanales alimentarios del mundo, con un enfoque en sostenibilidad, innovación con identidad y apoyo a los pequeños productores.
Este logro global ha sido posible gracias al trabajo articulado del Comité Promotor de Manabí Región Mundial de la Gastronomía 2026, conformado por el economista Leonardo Orlando Arteaga, prefecto del GobiernoProvincial de Manabí; el doctor Marco Zambrano Zambrano, rector de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí; el ingeniero Orazio Bellettini Cedeño, director ejecutivo de Fundación Fuegos; y el ingeniero Luis Villacréses, representante de la Cámara de Industrias y Producción de Manabí.
“Este es un logro del Ecuador ante el mundo, una victoria colectiva que nace del alma de nuestra gente y del valor de lo auténtico. Hoy, Manabí ha hablado con fuerza desde su cocina, desde sus raíces, historia y ancestralidad. Ganar este premio es abrirle las puertas al planeta para que conozca nuestra historia viva, y es también una muestra de que cuando trabajamos con visión y unidad, podemos alcanzar lo extraordinario”, expresó el prefecto Leonardo Orlando desde Euador, al recibir la noticia del reconocimiento.
El IGCAT ha confirmado que visitará Ecuador los días 27 y 28 de junio de 2025 para entregar oficialmente el reconocimiento de Manabí como Región Mundial de la Gastronomía 2026. El acto se desarrollará en Manabí y en Quito, la capital del Ecuador, consolidando al país como epicentro de la cultura gastronómica del continente.
Este momento no solo celebra un premio. Celebra siglos de historia, el talento de nuestras manos, la resiliencia de nuestro pueblo y la capacidad de Ecuador de ofrecer al mundo una propuesta auténtica, sostenible y profundamente humana. Manabí ya no es solo una región. Es una experiencia que transforma. Y hoy, Ecuador se presenta al mundo con sabor, memoria y alma.
Berlín, Alemania – Manabí ha dejado una marca imborrable en la ITB Berlín 2025, la feria turística más importante del mundo, destacándose con su Gastronomía Milenaria y el libro 200 recetas, sus relatos y secretos.
Durante tres días de presentaciones, la provincia compartió con el público internacional su riqueza culinaria, ofreciendo degustaciones de emblemáticos platos como ceviche estilo Jipijapa, tonga manabita, corviche y torta de maní con pescado. Además, visitantes de diversos países participaron en la preparación de estos manjares, viviendo una experiencia gastronómica única.
En el marco del evento, se realizó la entrega oficial del libro Manabí Gastronomía Milenaria al Embajador de Ecuador en Alemania, Diego Morejón Pazmiño, fortaleciendo el reconocimiento de nuestra cocina a nivel global.
Este cierre exitoso no habría sido posible sin el respaldo del Ministerio de Turismo del Ecuador y el trabajo conjunto de todos los representantes del país que, con sus platos, hicieron de esta feria una verdadera muestra de nuestra diversidad gastronómica.
Manabí continúa su camino hacia el reconocimiento mundial, llevando su historia, sabores y tradiciones a nuevos escenarios internacionales.